Evidencia de la Degradación Cognitiva por IA

Los críticos y defensores de la IA generativa están compitiendo por recopilar evidencia de que esta nueva tecnología obstaculiza (o potencia) las capacidades de pensamiento humano, pero los datos simplemente no están disponibles aún.
Por qué es importante: Por cada utópico que predice una era dorada del aprendizaje potenciado por la IA, hay un escéptico convencido de que la IA traerá una nueva era oscura.
Desarrollo de la noticia: Un estudio titulado "Tu cerebro con ChatGPT", realizado en el MIT el mes pasado, despertó la esperanza de que podría ser posible dejar de adivinar qué lado de este debate tiene razón.
- El estudio buscó medir el "costo cognitivo" de usar IA generativa al observar a tres grupos encargados de escribir ensayos breves, ya sea por su cuenta, utilizando Google, o usando ChatGPT.
- Encontró, muy grosso modo, que cuanto más ayuda recibían los sujetos con su escritura, menos actividad cerebral, o "conectividad neural", experimentaban mientras trabajaban.
Sí, pero: Este es un estudio en formato preimpreso, lo que significa que no ha sido revisado por pares.
- Ha enfrentado críticas por su diseño, tamaño pequeño y su dependencia del análisis electroencefalográfico (EEG). Y sus conclusiones están llenas de advertencias y precauciones.
- En su propio sitio web, los autores del MIT piden a los periodistas que no digan que su estudio demuestra que la IA "nos está volviendo más tontos": "Por favor, no utilicen palabras como 'estúpido', 'tonto', 'pérdida mental', 'daño'... Esto hace un gran daño a este trabajo, ya que no usamos este vocabulario en el artículo".
Entre líneas: Los estudiantes que aprenden a escribir bien, normalmente también aprenden a pensar con más claridad. Por lo tanto, parece sentido común suponer que dejar que los estudiantes externalicen su escritura a un chatbot embotará sus mentes.
- A veces, una buena investigación confirmará este tipo de suposición. Pero a veces, nos sorprenden.
- Otros estudios recientes han intentado examinar dimensiones de la tesis de que "la IA lastra nuestros cerebros" — como si usar IA conduce a homogeneidad cultural, o cómo el aprendizaje asistido por IA se compara con la enseñanza humana.
- A principios de este año, un estudio de la Universidad de Pensilvania/Colegio Wharton descubrió que las personas que investigan un tema preguntando a un chatbot de IA "tienden a desarrollar un conocimiento más superficial que cuando aprenden a través de una búsqueda web estándar".
La gran imagen: A medida que la IA se introduce rápidamente en el servicio de la sociedad, el mundo tiene hambre de científicos que expliquen cómo una herramienta que transforma el aprendizaje y la creación afectará al cerebro humano.
- El cambio acelerado nos hace ansiar respuestas rápidas. Pero una buena investigación requiere tiempo — y cuesta dinero.
La IA generativa es simplemente demasiado nueva para que tengamos algún tipo de dato científico útil o confiable sobre su impacto en la cognición, el aprendizaje, la memoria, la resolución de problemas o la creatividad. (Olvídate de "inteligencia", que carece de claridad científica).
- No obstante, la sociedad avanza con un vasto experimento incontrolado sobre sujetos humanos — como hemos hecho casi siempre con las nuevas olas de tecnología, desde los ferrocarriles y automóviles hasta Internet y las redes sociales.
Nuestra burbuja de pensamiento: A medida que herramientas nuevas y tentadoras pero arriesgadas se han vuelto visibles, nuestra especie siempre ha elegido la puerta de "inspeccionar y descubrir".
- Ya que incluso los temores de que la IA podría destruir a la humanidad no han sido suficientes para frenar su investigación y despliegue, parece absurdo pensar que frenaríamos el paso solo para limitar la deuda cognitiva.
Recuerdo: Los lectores con recuerdos aún funcionales pueden recordar el alboroto en torno a un artículo de portada de Atlantic de Nicholas Carr de 2008 titulado "¿Google nos está volviendo estúpidos?"
- En aquel entonces, el miedo era que la dependencia excesiva de pantallas y motores de búsqueda para proporcionarnos respuestas rápidas podría perjudicar nuestra capacidad para adquirir y retener conocimiento.
- Pero ahora, en la era de ChatGPT, la dependencia de la búsqueda en Google está siendo enmarcada por estudios como los del MIT y Wharton como una alternativa superior a las respuestas convenientes — y a veces inventadas — de la IA.
La conclusión: En tecnología, la novedad que induce miedo hoy suele convertirse en una rutina cotidiana mañana — y nadie en el negocio de la IA va a permitir que estudios preliminares frenen esa transformación.
Para más contenido especializado, ¡suscríbete a nuestro boletín!
Comments ()